
¿EL FIN DE UN ERA? ANNA WINTOUR Y SU CAPÍTULO FINAL EN VOGUE
Dentro del mundo de la moda se ha dado una noticia impactante, pues una de las mujeres que ha sido un símbolo de poder en este rubro ha decidido dejar la batuta que lidera desde hace años en Vogue, cerrando un capítulo histórico en la moda.
De esta manera Anna Wintour ha dejado su cargo como editora en jefe de Vogue Estados Unidos tras 37 años al frente de la revista. Sin embargo, no se retira del todo. Ahora se enfocará en sus funciones como directora editorial global de Vogue y directora de contenidos de Condé Nast, supervisando marcas como Vanity Fair, GQ, Wired y más.
Este movimiento busca refrescar la edición estadounidense con una nueva visión editorial, mientras Wintour se concentra en fortalecer la estrategia global del grupo.
Aún no se ha anunciado quién ocupará su lugar, pero se especula que será alguien con una mirada contemporánea y sensibilidad digital.
LAS HUELLAS DE WINTOUR EN LAS PÁGINAS DE VOGUE
Desde su llegada en 1988, Wintour transformó Vogue en una plataforma cultural, llevando a celebridades como Beyoncé y Michelle Obama a la portada, y convirtiendo la Met Gala en el evento de moda más influyente del mundo. Su legado es tan icónico que inspiró la novela y película El diablo viste a la moda.
La trayectoria de Anna Wintour en Vogue es una de las más influyentes y transformadoras en la historia del periodismo de moda.
Nacida en Londres en 1949, Wintour comenzó su carrera en 1970 como asistente editorial en Harper’s & Queen. Tras pasar por Harper’s Bazaar y la revista New York, se unió a Vogue en 1983 como directora creativa. En 1988, asumió el cargo de editora en jefe de Vogue Estados Unidos, marcando el inicio de una era revolucionaria.
Su primera portada en noviembre de 1988 rompió esquemas: la modelo Michaela Bercu lucía unos jeans Guess y un suéter de alta costura de Christian Lacroix. Esa mezcla de lo “alto y lo bajo” fue una declaración de intenciones: Vogue sería más accesible, más moderno y más conectado con la cultura popular.
Durante sus 37 años al frente, Wintour convirtió Vogue en una plataforma global de tendencias. Impulsó a diseñadores emergentes como Alexander McQueen y Marc Jacobs, y colocó a celebridades como Madonna, Beyoncé y Harry Styles en portada, redefiniendo el concepto de ícono de moda.
Desde 1995, fue la mente maestra detrás del Met Gala, transformándolo en el evento de moda más importante del mundo. Cada invitación pasaba por su aprobación, y su visión convirtió la gala en un espectáculo cultural de alcance global.
Con su corte bob, gafas oscuras y presencia imponente, Wintour fue apodada “Nuclear Wintour” por su exigencia y perfeccionismo. Aunque enfrentó críticas por la falta de diversidad en la revista, en 2020 reconoció públicamente estos errores y promovió cambios internos.

Desde el momento en que se dio a conocer la noticia sobre la salida de Wintour en Vogue US, se habla de los posibles sucesores de Anna Wintour en esta publicación. Los qué más resuenan son:
– Edward Enninful: Exeditor de Vogue Reino Unido, es uno de los candidatos más fuertes. Su enfoque inclusivo y su sensibilidad visual lo posicionan como un favorito natural para liderar una nueva era.
– Claire Thomson-Jonville: Actualmente jefa de contenido editorial de Vogue Francia, es conocida por su estética minimalista y su enfoque editorial contemporáneo.
– Anna Dello Russo: Ícono de estilo y exeditora de Vogue Japón, su enfoque maximalista y teatral sería un giro radical respecto al legado de Wintour.

En cuanto a los cambios estéticos, se espera una transición hacia una estética más diversa, digital y culturalmente conectada. La figura del nuevo “jefe de contenido editorial” (en lugar de editor en jefe) sugiere una estructura más horizontal y colaborativa.
Esto podría abrir la puerta a:
-Portadas más experimentales y menos centradas en celebridades tradicionales.
-Mayor presencia de voces emergentes, tanto en moda como en activismo.
-Un enfoque visual más global, menos centrado en el lujo clásico y más en la autenticidad cultural.
Wintour seguirá supervisando desde su rol global, pero esta es la primera vez en décadas que Vogue US tendrá una nueva voz al frente.